Entrevista con José González, estudiante de odontología recién graduado
Por Andrea García, asistente de posgrado en la Oficina de Diversidad e Inclusión Institucional
Nota del editor: Esta entrevista se recortó y editó ligeramente por cuestión de claridad.
Andrea: ¿Cuál ha sido tu formación académica y cuándo anticipas graduarte?
José: Estudié por cuatro años en la Facultad de Odontología en la Universidad Marquette. Hice mis estudios en Marquette High School y cursé la licenciatura en ciencias biológicas en la Universidad Marquette. Posteriormente, hice un año de posgrado en la Universidad de Wisconsin-River Falls. Obtuve una maestría en biología con énfasis en biología oral por la Universidad de Nueva York. La graduación de la facultad de odontología fue el viernes, 21 de mayo. A contrarreloj, completé los requisitos y terminé todo para poder graduarme y comenzar a ver pacientes.
Andrea: Cuéntame sobre la historia de tu familia.
José: Mis hermanos y yo somos estudiantes universitarios de primera generación. Mis padres emigraron de México en los años 70 para buscar trabajo aquí. En México, asistieron a la escuela quizás hasta el 4to o 5to grado. Para las familias de agricultores era común estudiar unos años de primaria pero después abandonar los estudios para trabajar en las tierras de la familia y no continuar con los estudios superiores.
Andrea: ¿Siempre quisiste estudiar odontología?
José: No seguí un camino muy directo para entrar a odontología ni pensé que terminaría siendo un dentista. Siendo un niño que creció en el sur de Milwaukee, quería hacer algo donde pudiera servir a los demás. Durante mis primeros años de estudio, asistí a escuelas jesuitas donde siempre se nos inculcó el servicio y la educación. Así que siempre quise ponerme al servicio pero nunca imaginé que como dentista.
Andrea: ¿Podrías contarme cómo llegaste al punto donde estás ahora?
José: Tuve acceso a programas como Upward Bound, EOP (Programa de Oportunidades Educativas) y HCOP (Programa de Oportunidades para Carreras en Ciencias de la Salud) que se enfocaban en niños subatendidos. Aprendimos sobre la universidad y las carreras con la finalidad de que pudiéramos empezar a pensar en las profesiones y en la educación superior después de la escuela secundaria. Ahí conocí lo que se requería para entrar a la facultad de odontología. Considero que todas estas oportunidades me permitieron aplicar a la facultad de odontología, ser admitido, sobrevivir los estudios y graduarme.
Andrea: ¿Por qué los programas como TRIO y HCOP son importantes? ¿De qué manera te impactaron?
José: Estos programas me ofrecieron oportunidades que de otra forma no habría tenido. Nos pusieron en igualdad de condiciones con nuestros compañeros.
Como parte del programa pre-universitario Upward Bound, pasaba los veranos de mi escuela secundaria aquí en Marquette y tomaba clases de lunes a viernes aprendiendo matemáticas y ciencias. Era una mezcla de educación y diversión. ¡Exploramos el país! Fuimos hasta Texas, Ohio, Illinois y partes de Wisconsin. Visitamos las escuelas del sistema UW.
En la universidad, formaba parte de los programas EOP y HCOP. Muchos de mis maestros en estos programas eran de minorías. Pienso que esto facilitó que los estudiantes se sintieran motivados y conectados. Sentíamos la confianza de hacer preguntas sobre ciertos temas que desconocíamos. Recuerdo que estos programas eran muy muy informativos, divertidos y eran un gran apoyo y una gran oportunidad. Nos ayudaron a continuar sobresaliendo y superando el siguiente obstáculo. Nos ayudaron a tener éxito en la educación superior.
Andrea: ¿Cuáles fueron algunas dificultades que enfrentaste en el proceso y cómo las superaste?
José: Pienso que no fui el único que tuvo dificultades en la escuela de odontología como estudiante minoritario, me refiero a que muchas veces no contábamos con mentores que fueran como nosotros. Por ejemplo, no tengo familiares dentistas a quienes pueda considerar un mentor. La mentoría juega un papel muy importante para acompañar a cualquier profesional a que asuma los retos, aprenda a gestionar el estrés, ansiedad, depresión y continúe superando lo que se le presente.
Es muy estresante hacer trabajo clínico y estudiar a la vez, pero es posible. Pienso que es importante tener amigos, apoyo y también recursos profesionales. Marquette cuenta con un gran Centro de Consejería para que podamos hablar con el personal de ahí, de ser necesario. Es bueno conocer los recursos y las oportunidades disponibles para que podamos recibir ayuda.
Andrea: Además de las prácticas clínicas, ¿de qué otra forma has podido servir a la comunidad de Milwaukee?
José: Tuve el privilegio de servir como presidente de la Asociación Dental de Estudiantes Hispanos en la sección de Marquette durante mi 3er año en odontología. He participado en la organización desde mi primer año ya que su misión era tener una conexión directa con la comunidad de Milwaukee, lo cual concordaba con lo que buscaba. Inmediatamente, empecé a construir estas ideas en mi cabeza para determinar que podríamos hacer como asociación de estudiantes para servir a la comunidad local.
Durante mi 3er año en odontología, conté con una excelente mesa directiva y logramos llevar a cabo el primer “Día del Bienestar.” Trajimos a estudiantes de entre 6 y 10 años provenientes de 13 escuelas públicas y chárter acompañados de sus padres.
El día estuvo dedicado a dar instrucciones sobre higiene bucal, pero también se habló de nutrición, ejercicios físicos y gestión del estrés y del enojo. Los niños trabajaron en dibujos sencillos mientras que sus padres asistieron a charlas sobre salud mental impartidas por estudiantes de doctorado del Departamento de Psicología de Marquette. Incluso tuvimos un almuerzo todo incluido después con todos los estudiantes de odontología, el personal y los niños, en el cual nos sentamos y conversamos.
Ese evento fue un aprendizaje muy gratificante para mí. Los padres estuvieron muy receptivos. Una mamá se me acercó y me dijo: “Muchísimas gracias. Me encantó la charla. Espero que vuelvan a hacer esto el próximo año.” No imaginé que los padres fueran a responder de tal forma. Pero, inmediatamente vi lo benéfico que fue para la comunidad, facilitar un espacio para que los miembros de la comunidad hablaran sobre salud mental.
Andrea: ¿Qué consejo les darías a los estudiantes o a ti mismo cuando eras más joven?
José: ¡Acérquense a personas y mantengan comunicación con ellas! Hagan muchísimas preguntas y cultiven amistades con personas que estén en la profesión en la que les gustaría estar. Éstas son las personas que han atravesado lo que ustedes están intentando hacer. Ellos lo están viviendo y les encantará compartir información con ustedes.
También sugeriría encontrar a un mentor que se convierta en una parte de su vida y hablar con él o ella regularmente. Pueden salir con ellos y comer algo. Dichos encuentros facilitan la conversación y las preguntas para que de alguna forma se pongan en su lugar. Luego, se puedan preguntar: “¿Me veo reflejado(a) en esa vida? o ¿Me imagino haciendo eso o no?”
Pueden leer libros y estudiar toda su vida, pero la satisfacción emocional más grande surge cuando creamos conexiones, ya sean con nuestros profesores o con nuestros pacientes.
Usen el poder de las relaciones para obtener información, establecer redes de contactos y ver las oportunidades que se presenten.
Esta historia es parte de la serie “Todos Somos Marquette”, la cual celebra la diversidad y la inclusión. Muchos de estos artículos están disponibles en español también.